COMUNICADO DE LA CANDIDATURA DE JOSÉ IGNACIO DEL REY

Habiendo tenido conocimiento del comunicado emitido por la Hermandad de los Estudiantes el pasado miércoles 11 de diciembre, en el que se informa sobre los tristes sucesos acaecidos en el proceso electoral, la candidatura encabezada por José Ignacio del Rey quiere aclarar y poner en conocimiento de nuestros hermanos y hermanas los siguientes puntos: 

1.- Notificación de inadmisión de la candidatura. El lunes 11 de noviembre nos notificaron por escrito el acuerdo del cabildo de oficiales de la Hermandad de los Estudiantes celebrado el jueves 7 de noviembre, por el que se inadmitía la candidatura encabezada por José Ignacio del Rey Tirado. 

La Junta de Gobierno no ofreció ninguna explicación sobre cuáles fueron los motivos que le llevaron a comunicar esta decisión de forma tardía, habiendo dejado pasar cuatro días desde de la celebración del cabildo, estando inmersos ya en la semana de celebraciones del centenario fundacional. 

2.- Posibilidad frustrada de subsanación. Previo a la celebración del citado cabildo, esta candidatura tuvo conocimiento de la existencia de un leve defecto en dos partidas de bautismo de dos de sus miembros (ambos habían sido antiguos miembros de Junta de Gobierno de la Hermandad de los Estudiantes): en una faltaba una parte de la fecha (no la fecha completa, como se indica erróneamente en el punto 9 del comunicado de la Hermandad) y la otra era la impresión del PDF del certificado original de bautismo (tal y como se envió por la propia Parroquia de Madrid, con sello y firma original del párroco). 

De inmediato se realizaron gestiones para obtener una nueva partida con la fecha completa y, con respecto a la otra, para pedir su original en papel (ambas son de Diócesis de fuera de Sevilla). 

Se puso en conocimiento de la Junta de Gobierno, a través del Sr. Director Espiritual, que entendíamos que era posible la subsanación de los defectos advertidos por la Comisión electoral y que la candidatura estaba en disposición de subsanarlos en el momento que fueran requeridos para ello, incluso inmediatamente. No hubo respuesta alguna. 

3.- Resolución adoptada por personas con interés directo. Reunidos el lunes 11 de noviembre para recibir la notificación del cabildo, se hizo ver al Hermano Mayor y a varios miembros presentes de la Junta de Gobierno que esta decisión no era acorde a la legalidad vigente (ni canónica, ni civil en ningún orden), así como que constituía una falta al espíritu de fraternidad que debe regir en una Hermandad, y que la misma podía acarrear consecuencias negativas imprevisibles a nuestra institución. 

Además, la resolución se había tomado por miembros del cabildo de oficiales con un evidente interés directo en las elecciones, habida cuenta de que formaban parte de la otra candidatura concurrente, siendo por ello juez y parte en los hechos acaecidos.  

La única respuesta que se obtuvo es que la decisión era irrevocable y que procediéramos a recurrir ante la autoridad eclesiástica, si así lo estimábamos. Consideramos que, de haberse optado por la subsanación de los defectos en el propio seno de la Hermandad, nada de lo ocurrido posteriormente habría tenido lugar.  

4.- Búsqueda de una solución amistosa. Esta candidatura ha agotado todos los medios a su alcance para promover una mediación y obtener una solución amistosa de este asunto, a fin de evitar la interposición del recurso ante la autoridad eclesiástica. 

Todos los esfuerzos y contactos habidos con el Director Espiritual, con miembros de la Junta de Gobierno y de la Comisión Electoral y con la Delegación de Asuntos Jurídicos para las Hermandades, fueron infructuosos, quedando como única alternativa recurrir la decisión. 

No obstante, y pese a lo ya expuesto, queremos expresar a todos los hermanos las oportunas disculpas por las circunstancias anteriormente indicadas, por el error cometido y por las incomodidades y confusiones que hayan podido ocasionar, a todas luces involuntarias y carentes de pretensión diferente a la de atender y cumplir, con absoluta buena voluntad, las prescripciones y requisitos para concurrir en la candidatura presentada. 

5.- Discreción y silencio. A fin de no perjudicar a la Hermandad, máxime en la semana que celebraba su centenario, esta candidatura optó por mantener silencio. No se realizó réplica a la injusta decisión de la Junta de Gobierno, ni al desafortunado comunicado que la Hermandad hizo público el martes 12 de noviembre; información que no respondía a la estricta veracidad de los hechos, ni de la situación acontecida, y que más que informar a los hermanos, pretendía justificar la inexplicable e interesada decisión de la Junta de Gobierno. 

6.- Presentación de recurso solicitando poder subsanar los defectos encontrados. Habida cuenta de la imposibilidad de lograr una solución amistosa para este conflicto, la candidatura, a través de José Ignacio del Rey, interpuso un recurso ante el Sr. Delegado de Asuntos Jurídicos para las Hermandades el viernes 15 de noviembre. Curiosamente, de dicho recurso nada se indica en el comunicado emitido por la Hermandad el 11 de diciembre. 

En tal recurso únicamente se solicitaba permiso para la subsanación de los leves defectos encontrados en las dos partidas de bautismo. No se impugnaba ningún aspecto del proceso electoral ni de la otra candidatura concurrente; de hecho, en el mismo se solicitaba que, para evitar perjuicios a la Hermandad, la candidatura aceptaba -si se admitía la obvia subsanación de los leves defectos- que el proceso siguiera en sus plazos, asumiendo la pérdida del plazo del voto por correo que habríamos sufrido, para no contribuir a una polarización de la Hermandad. 

7.-Indefensión causada por desinformación. Ninguna noticia se ha tenido de lo acontecido hasta el comunicado mediante el que la Hermandad desconvocó las elecciones, en el que hay varias cuestiones que causan sorpresa:

a) Llama la atención que la Junta de Gobierno derive la responsabilidad continuamente a agentes externos: Director Espiritual, Comisión Electoral, Delegado de Asuntos Jurídicos… Insistimos en que con buena voluntad y en el espíritu de confraternidad que debe unir a los hermanos de nuestra corporación, la Junta de Gobierno y su Hermano Mayor podrían haber intervenido para solventar esta incidencia de forma fraternal y amistosa, y así no involucrar a la autoridad eclesiástica y evitar la exposición pública innecesaria de esta cuestión que ha sufrido nuestra Hermandad en las últimas semanas. 

b) Por más que se alegue que la inadmisión fue por orden directa de la autoridad eclesiástica, la misma sólo transmite, según refiere el propio comunicado “la obligación de velar por el cumplimiento de todas y cada una de las normas relativas al proceso electoral y muy especialmente, aquellas relativas a las condiciones para ser candidato”; esas condiciones no son otras que cerciorarse que los candidatos están bautizados, lo cual le constaba a la Junta de Gobierno de los dos candidatos afectados, con independencia de que el documento que certifica el requisito adoleciera de algún defecto menor. No se ha querido interpretar la norma con espíritu fraterno, ni conforme los principios del derecho canónico.  

c) Igualmente, a esta candidatura no le ha sido notificado ningún documento, decreto o escrito que haya recibido la Hermandad de la Delegación de Asuntos Jurídicos, habiendo tenido conocimiento de todas estas cuestiones por los comunicados emitidos por la Hermandad en sus medios oficiales, al igual que el resto de los hermanos, pese a ser parte interesada en el proceso. 

d) Resulta sorprendente que por mediación de este comunicado tengamos conocimiento de que nuestra candidatura -que ya fue inadmitida en cabildo de 7 de noviembre- sea inadmitida nuevamente en un nuevo cabildo celebrado el 21 de noviembre, cuando esa nueva inadmisión ya no era obviamente posible. Tampoco se nos ha notificado, hasta la publicación del comunicado, esta segunda inadmisión, lo que deja a las claras la falta de equilibrio y la indefensión sufrida en todo este proceso, ya que es obvio que la otra candidatura era conocedora de todos estos aspectos con anterioridad. 

e) Llama la atención que, una vez presentado nuestro recurso ante la autoridad eclesiástica el 15 de noviembre tras la primera inadmisión de nuestra candidatura, sea cuando la Junta de Gobierno compruebe que la otra candidatura aprobada inicialmente también adolecía de defectos, tras ser verificada nuevamente a la luz de la normativa diocesana y ante el requerimiento realizado de nueva comprobación por parte de la autoridad eclesiástica, procediéndose urgentemente a su inadmisión sin anunciarlo a los hermanos mediante un comunicado -como sí ocurrió con nuestra candidatura- hasta el comunicado del 11 de diciembre el que se anunciaba la suspensión del cabildo de elecciones. 

f) Es llamativo que, la Junta de Gobierno, reunida en cabildo de oficiales el pasado 21 de noviembre, tomase la decisión de desconvocar los cabildos de elecciones y cuentas y haya esperado hasta 19 días para notificarlo a sus hermanos, sin ninguna explicación, en su comunicado del 11 de diciembre. 

g) El hecho de elevar a consulta (nuevamente de forma innecesaria) a la autoridad eclesiástica, según el comunicado “a fin de que nos indique la forma de proceder ante esta atípica situación”, no obsta para que los hermanos y hermanas de nuestra corporación, así como nuestra candidatura, tuvieran derecho a la cumplida información sobre esa desconvocatoria, ya que afectaba directamente a los derechos de sufragio activo y pasivo de todos nuestros hermanos.  

h) Igualmente, es sorprendente que, según indica el comunicado de la Hermandad, no es hasta siete días después del cabildo de oficiales en el que se inadmiten ambas candidaturas, es decir, el 28 de noviembre cuando se comunican a la autoridad eclesiástica los acuerdos del citado cabildo celebrado una semana antes. No se explica el motivo de la tardanza en realizar dicha comunicación ante una situación tan grave e insólita. 

8.- Acatamiento de la decisión de la autoridad eclesiástica. Como no puede ser de otra forma, la candidatura acata la decisión de la autoridad eclesiástica, a pesar de que nos causa honda preocupación el nuevo retraso de las elecciones, lo que no va sino en perjuicio de la propia Hermandad, que tiene gran cantidad de tareas pendientes que no se están realizando y que su demora perjudica a la institución y a sus hermanos. 

9.- Excesivo periodo de prórroga. Resulta paradójico que por parte de la autoridad eclesiástica se acuerde dilatar las elecciones tanto tiempo, y prorrogar el mandato de una Junta de Gobierno que ya estaba prorrogado, no respetando los plazos naturales de las Reglas. La convocatoria de elecciones que “habrá de tener lugar, después de celebrada la Semana Santa” hace que los comicios no puedan celebrarse, al menos, hasta el mes de septiembre, lo que supone una prórroga de la actual Junta de Gobierno de más de 15 meses, cuando no existen razones objetivas para ello. Esto no ayuda a que el clima de la Hermandad sea el más conveniente.  

10. – Solicitud de dispensa de la Regla 51. Precisamente por lo anterior, vamos a instar a la Junta de Gobierno a que solicite a la autoridad eclesiástica la dispensa de la Regla 51, de forma que no sea preciso cumplir el plazo mínimo de entre cuatro y seis meses desde la convocatoria a la fecha de celebración efectiva de las elecciones, para que puedan celebrarse en los meses de mayo o junio de 2025, como hubiera sido lo natural, atendiendo al espíritu y la letra de las Reglas. 

11. – Ausencia de trato igualitario y no discriminatorio. Según refiere el comunicado de la Hermandad, se ha garantizado “que todas las candidaturas recibieran un trato igualitario y no discriminatorio”. 

Como ha quedado demostrado, esto no ha sido así en ningún momento, habiendo recibido en todos estos sucesos y en este plazo sólo el escrito donde se inadmitía nuestra candidatura, sin recibir otra comunicación al respecto. Además, las comunicaciones realizadas por la Hermandad a los hermanos han sido dilatadas en su entrega sin razón aparente.  

12.- Elecciones libres. Una cuestión que podría haberse resuelto en una breve reunión, con espíritu fraterno y comprensión por todas las partes, ha derivado en una situación indeseable y desagradable para el conjunto de todos nuestros hermanos.  

Esta coyuntura se podría haber esquivado permitiendo la celebración de las elecciones en fecha y, lo que es más importante, permitiendo a los hermanos poder decidir libremente entre todas las candidaturas que decidieron presentarse, con libertad y sin cortapisas de ningún tipo, para elegir en buena lid a la futura Junta de Gobierno que los hermanos consideraran más idónea para los próximos cuatro años. 

13.- Mantenimiento de los compromisos asumidos. Los hermanos que conforman esta candidatura reafirman su compromiso con su Hermandad, y se ponen a disposición del resto de hermanos de la corporación, con el fin de que este periodo hasta las elecciones sea lo menos perjudicial posible.  

Igualmente comunicamos nuestra firme intención de mantener los compromisos asumidos tanto con la Hermandad como con todos los hermanos; en cuanto sea posible, volveremos a proponer un ilusionante proyecto de Hermandad en el que, sobre todo, no tengan cabida los lamentables hechos que estamos padeciendo en estas últimas semanas. 

Seguimos ilusionados con el proyecto planteado, en las áreas económica y patrimonial, de cultos y cofradía, de acción social y de vida universitaria, que hemos presentado a los hermanos; continuaremos mejorando para ofrecer el mejor modelo de Hermandad posible a todos ellos. 

14. Proyecto ilusionante, esperanzador y abierto. Insistimos en que nos volveremos a presentar para trabajar en que estos sucesos no vuelvan a ocurrir nunca. Nuestra Hermandad merece que con ilusión, esperanza y apertura haya personas dispuestas a servir a nuestra corporación, y a todos sus hermanos con lealtad, espíritu de acogida y afán de servicio. La Hermandad es una institución abierta y acogedora, en la que caben todos sus hermanos y todos merecen ser escuchados. Así seguimos comprometidos a hacerlo en cuanto sea posible. Todos somos de Los Estudiantes. 

En Sevilla, a 13 de diciembre de 2024. 

SOY DE LOS ESTUDIANTES

Candidatura de José Ignacio del Rey